Me contó, lo contó a muchos, que volvía de Buenos Aires y se detuvo a comprar una bolsa de naranjas a la vera de la autopista, compraba naranjas antes de llegar al cruce que tomaba para esquivar el tránsito rosarigasino (precisamente: AO12) y la frutera cobrándole le dijo: ”…Lole, así que va a ser candidato a Gobernador…”
La anécdota me tiene como un Forrest Gump, estuve cerca de los sucesos, pero no son mis sucesos y, acaso, no advertía cuánto se desarrollaba. Santa Fe, provincia, venía de un desaguisado mayúsculo: un vicegobernador menemista (uno de los 12 apóstoles de “El Carlos”, Antonio “Nito”, “el Trucha” Vanrell) que terminaba parando con el pecho una sumatoria de facturas inventadas para que todos los diputados y senadores que quisiesen se llevasen un dinero extra. Mayúsculo y solitario aventurero, El Trucha se hizo cargo del lío, la ciudad de Santa Fe es Administrativista, sabe todo de todos desde el 1600 y ese millón de pesos que se perdieron en facturas con la dirección en el río o en una plaza fue un penal inatajable que lo metió preso.
Duhalde viene a la emisora, le pide a Evaristo Monti (Evaristo) que tire un globo de ensayo, que lo ayude a instalar a “El Lole”. Evaristo tenía el 70% de la audiencia. Lo hace. Reacomodan la Ley de lemas uruguaya y, en números redondos Reuteman 400 mil, Rubeo 170 mil, hasta UPCN con Maguid (secretario General del Gremio) 28.000 votos- La suma de lemas y lemitas daba 670 mil y Horacio Usandizaga, solito, 630 mil (números redondos, no me pidan fineza) Usandizaga había renunciado a la intendencia rosarina. En un programa de televisión que conducía me dijo: “ Si gana Menem renuncio”. Menem ganó. Pasábamos 50 veces por día su frase. Renunció. No perdió votos, los aumentó. Reuteman Gobernador por la suma de votos. Listoooo.
Lole fue gobernador con dos primos y tres amigos. Un ministro de economía (“Juanchi” Mercier derivado de la vieja UCRI y MID, súper amarrete y fundamentalista). La economía de la provincia de Santa Fe aún conserva sus destellos. Hoy.
Mera Figueroa, por entonces cercano a Menem, lo dotó de un traductor de peronismo y lenguaraz fiel y callado: “El chango Funes”. Periodista. Letrista. Miguitas de Ternura con Cortéz. Siganmè, la canción de la campaña de Menem.
Funes le dijo a Reuteman: “ hay que llegar a Rosario con 100 mil votos de ventaja y sos gobernador…” Para el peronismo sigue siendo un dogma.
El primer reportaje (pactado) Evaristo me lo dejó a mi. Hacete cargo, tiene que durar media hora, compraron ese tiempo. Llegué grande a Evaristo, no soy cría suya pero era un personaje sin recambio. No lo quería a Reuteman…” no habla, te mira, se ríe, no habla… cómo saber que piensa si no habla…”
Tenía una hoja A4 con seis frases. Eso es todo lo que iba a decir y el pedido era no hablar de automovilismo. Terminé contracturado. Me dijo Gracias bigote… y el chango me guiñó un ojo. Es todo lo que conseguí de Reutemann. Las gracias. Pero lograba sacarle una sonrisa con Colón de Santa Fe (es de Unión, esas cosas no se cambian)
No era el intelectual en la escuela (pupilo, jesuitas) y preguntado que hacía en su casa dijo, de muchachito muy joven, “cuido lolechonesss”, ese era El Lole.
Cuando se produjeron las inundaciones en Santa Fe, de las que aún lo acusan, el único que con botas de goma y una linterna iba de noche a cada casa dejando un abrazo y cien pesos al darle la mano al que lo recibía. Insisto, nadie mas, era él solo. Ganó siempre en esos barrios con inundados y muertos.
No estoy contando bondades de estadista. Estoy contando el perfil de un Reutemann que no se conoce tanto porque no le preocupaban estas cosas.
En España Menem y todo el protocolo estaban demorados en un almuerzo, mas de una hora de demora porque no llegaba el Rey. Se había ido a probar un auto deportivo con un gobernador que estaba en la comitiva. Menem juró: no lo llevo mas.
Cuando el Ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires (Sarghini) llevaba 17 mil millones de patacones emitidos le preguntaron a Reutemann que dijo:” me dice Juanchi que no conviene endeudarse porque terminás cagando a los demás…” Santa Fe no tuvo cuasi monedas.
…”No me quiere “la sargento” y no me quiere el pingüino… el peronismo es un lío…”
Cuando la elección CFK versus Binner (era otro centroeuropeo, como sus padres, el lole fue criado con la luz del sol y excusado fuera de la casa, pozo ciego, minga de cloacas y luz eléctrica dijo, pobre Binner, va contra la viuda eso no tiene arreglo, no puede ganar nunca.
Obeid era gobernador, si dejaba todo como estaba Reuteman era nuevamente Gobernador o quien él decidiese. Obeid quitó la Ley de Lemas, Binner con 5.000 socialistas y los radicales por detrás ganó una provincia que no era kirchnerista, pero siempre fue peronista.
Escribí una vez una larga nota: ”Un gobernador NS/NC” donde sostenía su condición monosilábica. Me llamó. “…Habla el Lole, tenés razón, hablo poco, pero no digo boludeces como tus amigos rosarinos…”
No quería Rosario, no entendía la diversidad y el oportunismo de un puerto, era de cosechas , siembras y climas su vida. De retorno hacia sus pagos, esquivando Rosario, solía detenerse cerca de Ricardone, donde un hijo (casi propio) sembraba mientras andaba en el tractor. Paraba y charlaban. De qué hablaron, preguntaba yo cuando el hijo volvía a Rosario. De quintales, contestaba el hijo chacarero que la vida me dio.
Escribo esta nota sabiendo que está que se muere y no se muere, pero es igual. Alambró la provincia, él decidía diputados nacionales y senadores. El los diputados provinciales. Era jefe. Se extraña en el peronismo un Jefe de esa magnitud. En el socialismo extrañan un Binner, tan parco y tan ejecutivo como él. El radicalismo es otra cosa. Siempre fue otra cosa.
Cuando se memore a Reuteman se memorará al último caudillo que tuvo el peronismo santafesino. Y lo extraño – singular – que lo volvía único. No era militante político, en todo caso su afecto era por los Demócratas Progresistas. El peronismo no podía escaparse. Con Lole estaba atado. Hasta el pingüino lo sabía. Por eso nunca lo quisieron cerca. Ojo, Mauricio tampoco. Hagamos sicologismo. Lole podía vivir sin ellos. El resto tengo mis dudas. Su fragua de vida fue un monoplaza. Pupilo de los jesuítas, monosilábico y conductor de un monoplaza. De tonto ni el silencio. Doy fe. Fe periodística, la mas barata.
Colofón. Claro que medía mucho mas que NK, pero hizo una pregunta : ¿Quien mandará en Provincia de Buenos Aires?. Le contestaron, ni yo se quien puede manejarla. NK no preguntó nada. El resto es actualidad.